Situada en una posición elevada en las colinas de Santa Eulalia, esta propiedad ofrece un entorno único donde se combinan tranquilidad, naturaleza y vistas espectaculares. Ses Calas destaca por su diseño minimalista y formas geométricas que se integran perfectamente en el paisaje ibicenco. Su ubicación privilegiada permite disfrutar de amaneceres y atardeceres desde cualquiera de sus cuatro terrazas panorámicas.
La casa principal, de 623 m², se distribuye en dos niveles. En la planta superior se encuentra una cocina abierta con encimera de granito, un comedor circular y acceso a una terraza con pérgola rodeada de naturaleza. En la planta inferior hay un salón independiente y cuatro dormitorios en suite, todos con vistas al entorno natural. El dormitorio principal cuenta con un baño que incluye bañera exenta, ducha de lluvia y acabados que reflejan la esencia del paisaje.
La propiedad cuenta también con una segunda casa de 545 m², concebida en armonía con la ladera donde se ubica. En su interior, el salón presenta formaciones de roca natural y se conecta con una cocina de planta abierta que se extiende hacia una terraza con piscina infinita circular. Los cuatro dormitorios en suite disfrutan de vistas al entorno, y tres de ellos tienen acceso directo a una terraza compartida. Además, hay una casa de piscina con ventanales panorámicos y un anexo adicional que puede utilizarse como gimnasio, estudio o sala de juegos.
En una parcela de 22.000 m², la finca ofrece jardines paisajísticos, áreas de descanso, terrazas soleadas y dos piscinas, incluyendo una de 18 metros ubicada en la zona más alta, perfecta para disfrutar del entorno. El acceso es privado mediante entrada con portón, y dispone de una amplia zona de aparcamiento. Un conjunto diseñado para vivir plenamente el clima mediterráneo y sus inigualables vistas.