Ubicada en las tranquilas colinas del norte de Ibiza, cerca del encantador pueblo de San Carlos, esta propiedad combina privacidad absoluta con cercanía a las playas más bellas de la isla como Aguas Blancas, Pou des Lleó, Cala Mastella y Cala Boix. Con 590 m² construidos y una parcela de 33.000 m², se alza 200 metros sobre el nivel del mar, ofreciendo espectaculares vistas al valle de Morna, la costa este y hasta Formentera.
La vivienda se distribuye en varios niveles. La planta principal cuenta con un gran hall, salón con chimenea y acceso a la terraza, cocina gourmet conectada a un patio interior con estanque y barbacoa, despacho y aseo de invitados. Tres suites de 60 m² con baño privado, vestidor y terrazas independientes completan esta planta. El nivel inferior dispone de cuatro dormitorios en suite con vestidores y salida directa a la piscina.
La villa incluye alojamiento para personal, bodega, gimnasio exterior, sala de juegos/cine, biblioteca, spa, ascensor y lavandería totalmente equipada.
Destaca la piscina infinita climatizada de 14 × 4 metros rodeada de terrazas, jardines mediterráneos, áreas chill-out, bar y cocina exterior. En la azotea se ubica un espacio de entretenimiento con comedor para 16 personas, camas balinesas y estanques tropicales. El acceso es seguro gracias a la comunidad cerrada, portón automático y sistema de alarma.